La cúrcuma es objeto de acalorados debates sobre si ayuda o no a los perros con rigidez y artritis. Aunque no hay pruebas científicas suficientes en animales domésticos que lo confirmen, sí hay indicios claros de sus beneficios en humanos y numerosas pruebas anecdóticas de propietarios que han observado mejoras en sus perros. La incluimos en nuestra mezcla de hierbas junto con el mejillón de labios verdes NZ, para que los perros se beneficien de todos estos ingredientes que ayudan a las articulaciones.
La cúrcuma se absorbe mejor con pimienta negra o con una grasa saludable. El componente activo de la cúrcuma es la curcumina, que es un potente antioxidante y un agente antiinflamatorio que ayuda a calmar la inflamación y a aliviar el dolor asociado.
La cúrcuma no sólo es útil para las articulaciones, sino también para la digestión, ya que favorece el funcionamiento del hígado y, en particular, la digestión de las grasas. La cúrcuma también puede contribuir a la función cerebral y, en particular, a las sustancias químicas del cerebro que tienen un efecto protector sobre el estado de ánimo y el comportamiento. Así pues, aunque conocemos la cúrcuma como especia culinaria popular en la alimentación humana, donde se reconoce por su color dorado característico y su sabor brillante, sólo estamos empezando a conocer todas sus propiedades y beneficios para la salud.
